Con esta edad el bebé todavía no camina. Pero aun así, es muy importante ayudarle en sus movimientos que, poco a poco, evolucionarán del gateo a sus primeros pasitos en etapas posteriores. Por ello, es fundamental prestar atención al desarrollo de sus pies, proporcionándole el calzado adecuado y motivándole con ejercicios para su estimulación.
Comodidad para bebés que quieren recorrerlo todo
Mientras que en el primer semestre de vida del bebé, los zapatos eran elementos más bien decorativos y de protección contra el frío y la humedad, es a partir de los 7 meses cuando el calzado adquiere mayor importancia. El bebé empieza a desplazarse y dar sus primeros pasos. Un buen calzado le ayudará a hacerlo con seguridad, y a darle estabilidad en el inicio de la marcha.
Pero antes, es importante estimularle a gatear descalzo en casa, en la arena de la playa, sobre el césped del jardín.... ya que ello favorece el conocimiento de su propio cuerpo y le ayuda a mejorar su equilibrio, desarrollar los músculos, la formación del arco del pie y la circulación. En definitiva, a prepararse para dar sus primeros pasos.
Algunos consejos sobre el calzado
- Un buen calzado es aquel con el que el niño se siente cómodo.
- Debe ser ligero, flexible y un poco más largo y ancho que su pie, para evitar rozaduras.
- Elige materiales de fibras naturales, piel o lona, ya que favorecen la transpiración.
- Que se adapte sin oprimir y le proporciones confort térmico.
- Opta por los de punta redonda y cerrada, con espacio de sobra para sus dedos. Mejor si la punta está reforzada por si se pone de puntillas.
- Que se puedan adaptar al pie con cordones, hebillas o velcro, sobre todo en la parte del tobillo (las chanclas y los zuecos por ejemplo no están diseñados para caminar).
- Es importante que la suela sea antideslizante y con dibujos que aseguren un buen agarre, además de ser fina y blanda para que amortigüe y aporte flexibilidad.
- Los refuerzos y costuras interiores pueden producir rozaduras, por lo que mejor si están forrados.
- Para la etapa de gateo, la parte posterior debe estar reforzada sin ser demasiado rígida, para darle estabilidad en sus primeros pasos.
- Puede que al principio no distingas el derecho del izquierdo, ¡es normal, los zapatos para bebés apenas tienen forma!