Las papillas infantiles contienen grandes cantidades de diferentes cereales pero, una vez empiezan a comer sólidos y semisólidos, olvidamos algunos cereales menos conocidos y comunes como la cebada, el mijo y el centeno, y nos centramos en los más conocidos: el trigo, el maíz y el arroz. Todos los cereales contienen una gran fuente de nutrientes.
Para mantener una dieta rica y variada, dale papillas que contengan gran variedad de cereales y, posteriormente, intenta añadir en su dieta y en la vuestra todo tipo de cereales, consiguiendo recetas ricas en sabores y texturas.
Los cereales más comunes y que forman parte de la mayoría de cocina del mundo son el trigo y el arroz. Aún así, puedes disfrutar de una comida rica y variada con todo tipo de cereales como la cebada, el centeno y el mijo.
Conoce sus propiedades:
- Cebada (Hordeum vulgare): utilizada sobre todo en panes, copos y muesli. También se elabora la cerveza. La harina de cebada es rica en fibra. Tiene gran valor energético y fortalece gracias al alto contenido de calcio, fósforo, potasio y magnesio.
- Centeno (Secale cereale L.): cereal ideal para los panes. Es rico en fibra y mucílagos y es beneficioso para el buen funcionamiento del tránsito intestinal. Destaca, también, por su alto contenido en silenio y en vitamina B.
- Mijo (Panicum miliaceum): no contiene gluten y es ideal para celíacos. Sorprende por su sabor dulce y agradable y se utiliza en substitución de otros cereales. Según el tiempo de cocción, conseguimos una textura dura como el arroz o una textura más suave, como un puré de patatas. Destaca por su alto contenido en magnesio.